En la Costa Bermeja francesa, muy cerca de la frontera con España, el atractivo pueblo marinero de Collioure posee el privilegio de albergar el cementerio en el que descansa el poeta Antonio Machado. El gran poeta español encontró aquí un refugio a su huida de la dictadura franquista. Murió en 1939, sólo un mes después de su fuga de una Barcelona que estaba a punto de ser ocupada. Tres días más tarde también fallece su madre, Ana Ruiz. Antonio será enterrado en un nicho cedido por una vecina de Collioure, y su madre en un sitio reservado en el cementerio para personas que no disponían de sepultura. Descansan juntos desde 1958.

Desde entonces, su tumba se ha convertido en un lugar de peregrinación para admiradores del poeta y republicanos españoles. Le dejan numerosos poemas, cartas y hasta pedidos de protección. Todos estos documentos y objetos son resguardados por la Fundación Antonio Machado de Collioure, como una forma de mantener viva su memoria.